miércoles, 18 de marzo de 2009

Y dime

- Oye, Elena, ¿yo soy adulto?- le preguntó el chico.
- ¿Cuántos años tienes ya?
- Dieciocho.
- Entonces eres ya casi adulto - le dijo ella con una amplia sonrisa y marcando intensamente el "casi".
- ¿Y que es casi?
- Que aún te falta un poco para serlo.
- Y dime, ¿qué significa ser adulto?

Algunas veces te hacen preguntas como ésta y uno no sabe qué responder. Entrar en el rígido mundo de los adultos significa que los sombreros sólo son sombreros y no elefantes engullidos por alguna serpiente o el cancan de una joven bailarina o la chistera de un mago y que las responsabilidades suplantan a los sueños en los bolsillos. Pero, ¿cómo explicárselo a un hombre que aún piensa como un niño? Y ¿cuándo cruzamos realmente esta frontera dejando atrás la fantasía?