martes, 3 de agosto de 2010

Viajes

Los viajes son como pequeñas vidas.

Hay días en que todo sale bien, días en que todo sale patas arriba, días emocionantes, días aburridos, días tristes, días en que saltas de alegría, días en que te acuerdas de lo que has dejado atrás, días que sólo miras con esperanza hacia delante, días en que lo tienes todo organizado, días en que te dejas llevar, días para reir con amigos, días para imaginar, días para desconectar, días para reflexionar, días para disfrutar sin pensar en lo que vendrá luego.

Todos esos lugares, rincones, visiones, momentos y personas que se cruzaron en tu camino se convierten en sombras, en algo así como los sueños, que el tiempo transforma, desfigura y colorea para configurar el recuerdo.